Una de las principales formas de contagio de COVID-19 es entre personas que están en contacto cercano, a través de gotículas o microgotas de saliva que se producen cuando una persona infectada tose, estornuda o habla. Estas gotículas pueden terminar en la boca o en la nariz de quienes se encuentran cerca o posiblemente ser inhaladas y llegar a los pulmones, de esta forma el virus entra al sistema y provoca la enfermedad. También es posible que al tocar una superficie u objeto que tenga el virus pueda haber contagio si se toca la boca, la nariz o posiblemente los ojos. Conociendo esta información, es importante reforzar las prácticas de higiene personal dentro de cualquier establecimiento con el objetivo de cuidar la salud del personal. Las siguientes prácticas constituyen parte de las acciones a las que se les debe prestar mayor atención, respecto a la frecuencia y forma en la que se realizan:

Higiene Personal

  • Es muy importante que todo el personal esté informado de las características, síntomas y formas de contagio de COVID-19. Educar y concientizar al personal ayudará mucho a que realicen las prácticas adecuadas dentro del establecimiento.
  • Comunicación continua con el personal. Invitarlos a compartir de forma inmediata cualquier experiencia, síntomas, contactos con personas posiblemente infectadas.
  • Dar a conocer y vigilar el protocolo adecuado al estornudar o toser cuando sea necesario, utilizando el antebrazo para cubrirse la boca.
  • Poner en práctica el distanciamiento físico: evita dar la mano, abrazar o besar a otras personas, así como compartir comida, utensilios, vasos, plumas, celulares.

Claves importantes:

  • Las ayudas visuales son muy importantes. Deben ser claras y ser colocadas en lugares estratégicos.
  • Reforzar la capacitación y concientización a través de casos, videos, documentales, ejemplos, casos de éxito, entre otros.
  • Invitar a profesionales de la salud o expertos en la materia a dar pláticas informativas al personal.
  • Establecer un protocolo para comunicación de síntomas sin necesidad de asistir personalmente al establecimiento (por teléfono, por correo electrónico).

Lavado de manos correcto

Las manos son una de las vías más frecuentes de contagio de virus de una persona a otra. Una de las formas más económicas, sencillas e importantes de prevenir el contagio del virus es lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón.

Se recomienda seguir los siguientes pasos:

  1. Humedecerse las manos.
  2. Aplicar una cantidad suficiente de jabón en las manos. De preferencia líquido.
  3. Tallar enérgicamente las palmas, el dorso y entre los dedos de las manos.
  4. Lavarlas por lo menos 20 segundos, sin olvidar las muñecas.
  5. Enjuagar completamente con agua corriente.
  6. Secar las manos con papel desechable.
  7. Cerrar la llave del agua y abrir la puerta del baño con el mismo papel.

Claves importantes:

  • Tiempo de lavado de manos (sin excepción); al menos 20 segundos.
  • No es necesario utilizar agua caliente para el lavado de manos. Lo importante es usar jabón y lavar correctamente.
  • El gel desinfectante debe utilizarse sólo cuando no es posible lavarse las manos con agua y jabón, ya que no es un sustituto de esta práctica. Si va a utilizarse es importante que contenga al menos 70% de alcohol.
Lavado_del_area
No es necesario utilizar jabón antibacterial para lavar las manos. La clave no es el tipo jabón, sino realizar el procedimiento correcto de lavado de manos, en el momento necesario. Proveer estaciones de lavado de manos suficientes de acuerdo al número de personas que laboren en el establecimiento. Las estaciones de manos siempre deben contar con agua, jabón líquido, papel secante y bote de basura y vigilar que se mantengan siempre con insumos y en buenas condiciones. No se recomienda utilizar guantes. El hecho de portar guantes da a la persona una falsa sensación de seguridad, pues el personal cree que se ha creado una barrera permanente entre sus manos y el alimento que lo protegerá de cualquier contaminación. Esto puede hacer que, en lugar de reducir la probabilidad de contaminación cruzada, esta se potencialice.

Uso de cubrebocas

En México, el uso de cubrebocas se ha vuelto obligatorio para todos. Es de suma importancia capacitar al personal para que se utilice correctamente, de lo contrario, puede incrementar el riesgo de contagio y propagación del virus.

Estos son los pasos correctos a seguir para utilizar el cubrebocas:

  1. Lavarse las manos correctamente antes de colocar el cubrebocas.
  2. Revisar cuál es el lado correcto (las costuras gruesas corresponden a la parte interna del cubrebocas.
  3. Pasar por la cabeza y las orejas las cintas elásticas y colocarlo cubriendo completamente la nariz y boca. Es muy importante que las manos no toquen la parte interna.
  4. Retirar por detrás, sujetándolo de las ligas o elásticos, sin tocas la parte delantera de la mascarilla. Después, lavarse las manos.
Lavado_del_area

Claves importantes:

  • Proveer cobrebocas nuevos y limpios a todo el personal al iniciar el turno.
  • Se debe contar con suficientes insumos para reemplazar cubrebocas de ser necesario.
  • El cubrebocas debe cubrir siempre boca y nariz. Ajustarlo de ser necesario para que se ajuste a la cara.
  • Evitar tocar el cubrebocas mientras se traiga puesto, y si es necesario hacerlo, lavarse las manos después.
  • No compartir el cubrebocas. Es de uso personal.
  • No usar el cubrebocas en el cuello o en la cabeza.
  • Antes o después de utilizarse el cubrebocas no debe colocarse sobre ninguna superficie que pueda estar contaminada.
  • Cambiar el cubrebocas tan pronto como esté húmedo o sucio, roto, desgastado o perforado.
  • Colocar en la basura después de utilizar. Los cubrebocas desechables nunca deben de reutilizarse. Es conveniente asegurar una buena destrucción para evitar que los utilicen.
  • Conservar puesto el cubrebocas durante todo el turno. En caso de tener que retirarlo durante el turno, por ejemplo, para ir al comedor en la hora de comida, debe desecharse y al finalizar la hora de comida utilizar uno nuevo para regresar a trabajar.
  • En caso de utilizar escafandra como parte de equipo de protección, estas deben lavarse de forma habitual, de igual manera que los uniformes.
  • Las caretas pueden utilizarse como complemento si se considera necesario.

Uso de túneles u otras tecnologías para la desinfección de personal

El uso de túneles u otras estructuras físicas (cabinas, gabinetes, puertas) con rociado de productos para la desinfección, los dispositivos de pulverización y la radiación UV-C (200-280 nm), no se recomienda para humanos. De acuerdo con la OMS (Organización Mundial de la Salud) esto se basa en las siguientes observaciones:

  • Los productos químicos utilizados para el rociado (compuestos de amonio, cloro, peróxido de hidróxido, alcoholes, glutaraldehído) y otros compuestos como el ozono, causan daños en los humanos, como: irritación en la mucosa, la piel, los ojos, el sistema digestivo, y las vías respiratorias. Estos productos químicos están hechos para superficies inertes y agua, y no deben usarse en el cuerpo humano.
  • Los túneles u otras estructuras físicas con rociado de productos de desinfección, dispositivos de pulverización o radiación UV-C no son efectivos para inactivar el virus en humanos. Para que los productos químicos y la radiación UV-C funcionen como desinfectantes efectivos, las superficies deben limpiarse antes de la aplicación de una capa uniforme de solución química. Esto no es factible con los humanos.
  • Los tiempos de contacto de los productos de desinfección y las dosis efectivas requeridos para inactivar el virus, no se pueden cumplir en túneles u otras estructuras sin poner en riesgo la salud humana.
  • Los efectos en la salud humana dependen del tipo químico, la concentración, la duración de las exposiciones, la etapa de la vida y otros factores.
  • El uso de túneles u otras estructuras físicas con rociado de productos de desinfección, dispositivos de pulverización o radiación UV-C puede conducir a una mayor dispersión involuntaria del virus.
  • La percepción de desinfección podría dar como resultado una falsa sensación de seguridad y desalentar acciones con eficacia comprobada, como el distanciamiento social, el lavado de manos, evitar tocarse la cara y el uso de cubrebocas.
Estas medidas, aunadas a otras prácticas de higiene personal y prácticas de manufactura, son parte de las acciones de prevención que deben implementarse para contribuir a la propagación del virus del COVID-19. Es importante trabajar en la educación, concientización del personal, adopción de nuevas conductas y actitud responsable como parte de la cultura de prevención del sistema de cada empresa.